Cada equipo de béisbol cuenta con nueve jugadores defensivos en el campo: lanzador (pitcher), receptor (catcher), primera base, segunda base, tercera base, campocorto (shortstop), jardinero izquierdo, central y derecho. En la ofensiva, los mismos nueve jugadores aparecen en un orden de bateo (alineación) que se mantiene durante todo el juego, a menos que haya sustituciones.